En el telar de mi ser, entrelazo las letras que brotan de mi alma, tejidos de sentimientos y emociones que danzan sobre este lienzo negro que mi pluma transfigura. Anhelo que cada palabra, cada trazo, trascienda y se convierta en eco en tu ser para fundirte en el velo mágico de mi memoria. Que mis versos sean puentes que nos unan en un abrazo sólido, y que mi tinta sea un testigo del vínculo que florezca entre tú y yo. En cada línea trazada, en cada verso susurrado, te escribo con el alma para que en el tapiz de nuestras historias encuentres el eco vibrante de mi ser y la esencia de este nuestro encuentro. Que mis letras sean hilos de un lazo indisoluble entre tú y yo, donde el tiempo se detenga y la eternidad se haga presente. En cada palabra entrelazada, en cada estrofa compartida, tejamos juntos la trama de un sentimiento duradero, donde nuestras almas se encuentren en todos los rincones de esta bella historia.

1 de abril de 2015

Entre miradas...


Y así te observo: Desde la distancia de mi silencio...
Yo con mi prensa, sin fijarme en las letras. El café, humeando en la taza.

Tú estás ahí: Absorto en tus cosas, en tus palabras, en el siguiente verso... en la siguiente prosa de sensaciones... Perdido en ese mundo de letras, sonidos y sensaciones con las que te vistes siempre.
Y vagas..., vagas en mi mente, entre los espacios perdidos y encontrados en ese mañana que es hoy, en ese hoy que fue ayer... En ese será que es.
Inalcanzable en un segundo; permanente en un minutos; eterno en una hora...
Cuando te gires y me veas, cuando tu mirada se clave en la mía, esquiva y tímida de entrada, penetrante y fija después... Desafiante, retándote a no perder más tiempo... porque sabes que me tienes, que me encontraste, que un día me hiciste tuya... y tuya sigo siendo.
(Yo)

Heridas en la piel como grietas en la tierra,
secas pero lenas de recuerdos,
de polvo que lleva el aire de un lado a otro;
lágrimas en los ojos,
lágrimas que escuecen como quemadura en las manos,
esas que un día te abrazaron,
te acariciaron,
te rodearon con finas telas de terciopelo.
¡Ohhh!
Ya no puedo más.
Me quedo vacío como cántaro que va a la fuente.
Mi boca, mi cuerpo...
al ser derramado como chorro de manantial.
¿Dónde estás?
¿Qué paso?
Esta es mi cruz, mi angustia, mi calvario.
No dejes que me desangre lentamente...
Ven... Ven... Ven...
Quiero tu voz en mi oído,
ese te amo que me hacía perder el sentido
como venda en los ojos.
Buscaba tu olor, siempre llena de esa suave fragancia
que recorría mi olfato y entraba en mí como hielo que enfría,
que quema el alma...
Ven... Ven... Ven...
Abrázame, rodéame a ti, con fuerza.
Soy tu pequeña vasija,
tan delicada que tanto te gustaba acariciar;
lléname de ti, hazme florecer en ese jarrón que es tu cuerpo.
Hazme desear formar parte de ti,
como los pétalos de la rosa y sus espinas.
Sí, mi mal humor, que tanto te gustaba y te excitaba.
remetías en mí como la mejor y más salvaje bestia
pero con la delicadeza de la brisa de la mañana.
Ven... Ven...Ven.
Dime como antes me decías...
Eres mía.
Ven... Ven... Ven...

(Diego)

6 comentarios:

  1. Qué hermoso!!! ...sigo repitiendo, ese "eres mía", tiene una fuerza, una sensualidad, una ternura, un amor, una profundidad ...insuperables.

    Un beso ...mejor dos.

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  2. La verdad es que sí. Nadie mejor que tú para comprender el significado que en mí tiene.
    Un besazo.

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  3. Fascinante, sensual, tierno y muy intenso

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  4. no se quien eres

    no se que escribes

    no entiendo nada

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  5. Gracias, chic@s por vuestros comentarios. Un beso enorme.

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Sueña porque soñar es vivir y vivir es sentir...